El shabú es una metanfetamina cristalina, muy peligrosa y proveniente de Asia. Tiene escasa presencia en nuestro país y se encuentra muy extendida en el sudeste asiático y en EE.UU. Se trata de una nueva droga muy adictiva, ya que deja al consumidor sin dormir varios días. Provoca agotamiento tanto físico como psíquico, y es conocida como " la droga de los pobres", ya que así los más necesitados pueden afrontar largas jornadas de trabajo. Se cree que esta droga ya se utilizaba en la Segunda Guerra Mundial para combatir el agotamiento de los soldados. Una bolsita de Shabú cuesta aproximadamente 10 euros, suficiente para que el consumidor experimente un aumento de su energía corporal, provocando euforia y nerviosismo durante unas doce horas.
Síntomas y efectos secundarios:
El shabú puede ocasionar a corto plazo síntomas parecidos a los del parkinson, porque hace que erosionen los vasos sanguíneos que llegan al cerebro. Aparte del insomnio, agresividad o irritablilad, puede ocasionar enfermedades incurables como es la " meth mouth" o "meta- boca". El shabú se coloca debajo de la lengua para que se mezcle con el riego sanguíneo y así provoque el llamado subidón, por eso los dientes de los consumidores adquieren un color grisáceo que caen a los pocos meses. También esta droga puede distribuirse en pequeños cristales que se fuman vaporizados y casi no emiten olor.
Fabricación:
La fabricación del Shabú es fácil y barata, ya que su principal componente es la afedrina y este se encuentra en numerosos medicamentos para curar el resfriado. Se crean en laboratorios móviles de las mafias chinas, y pueden llegar a mover cientos de miles de euros al día.
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